Stop subsidios fosiles

Cada año se destinan al menos

405.100 millones de euros

en subsidios a la industria fósil en la UE

Semana de movilización

del 27 de mayo al 2 de junio

Esta primavera comienza un nuevo ciclo de Rebelión.

Estamos más organizadas, tenemos claro nuestro objetivo y somos más personas empujando hacia el fin de los subsidios a los combustibles fósiles. Nos encontramos en los inicios de una nueva ola de movilización del movimiento climático. Un gran número de movimientos de base y climáticos, entre los que se encuentra Rebelión o Extinción, junto a organizaciones no gubernamentales de toda Europa nos hemos unido dentro de la plataforma Unidas por la Justicia Climática (UJC), desde donde organizaremos movilizaciones masivas a nivel europeo, presionando a la UE para que ponga fin a los subsidios a los combustibles fósiles.

Stop subsidios fosiles Canal de Telegram @esXrebellion Campaña Stop EU Fossil Subsidies

La crisis climática nos azota con fuerza.

En 2023 la subida de temperatura media anual rozó los 1,5ºC, el límite que marcaba el acuerdo de París, lo que pone de manifiesto la necesidad de actuar de manera urgente. 2023 también pulverizó otros récords como la temperatura de la superficie del mar, subida del nivel del mar y extensión mínima de hielo de la Antártida entre otros. Las graves consecuencias de la crisis climática son ya una realidad en nuestro territorio. En Febrero de este año, la Generalitat de Catalunya tuvo que declarar el estado de emergencia por sequía, con restricciones en el uso del agua que afectan al 80% de la población, debido a 3 años de escasas precipitaciones. También hemos sido testigos de los incendios devastadores que llevaron a declarar zona catastrófica algunos de sus territorios a siete comunidades autónomas.

Este año comienza de forma especialmente grave, según Gavin Schmidt, científico de la NASA: "Si la anomalía térmica (de 2024) no se estabiliza en agosto (...) esto implicaría que el calentamiento del planeta está ya alterando de forma fundamental cómo funciona el sistema climático, mucho antes de lo que los científicos habían anticipado". Además, todo esto no hará más que agravarse exponencialmente si no se toman medidas rápidamente. Según el último informe del IPCC, lo que hagamos en esta década será determinante para evitar superar ciertos umbrales clave. Pero los últimos compromisos de reducción de emisiones de los Estados son totalmente insuficientes y nos dirigimos hacia unos catastróficos 3ºC.

¡Basta de financiar la extinción!

A pesar de la gravedad y la necesidad de cambios urgentes, nuestros gobiernos no sólo no actúan de forma acorde a la emergencia si no que nos llevan en la dirección contraria, invirtiendo en mantener nuestra dependencia fósil. En los últimos años, los subsidios a los combustibles fósiles no han parado de aumentar, a pesar de que la UE se comprometió eliminar todos los subsidios a los combustibles fósiles tanto directos como indirectos, como muy tarde, el año 2025.

Cada año se destinan al menos 405.100 millones de euros en subsidios a la industria fósil en la UE. Como referencia, esto es diez veces más que la cantidad gastada en políticas climáticas (menos de 40 mil millones de euros al año). Eso significa que las grandes corporaciones reciben recortes de impuestos que ascienden a más de mil euros por contribuyente de la UE al año.

Estos subsidios representan además una tremenda injusticia por varias razones:

Aún no es tarde para el cambio.

Los millones de euros en subsidios a la industria fósil en la UE, podrían ser usados para la descarbonización y la transformación de nuestras economías ayudando también a mejorar la vida de las personas de muchas maneras. Entre 2015 y 2017, más de 40 países dieron pasos en este sentido, como Marruecos, Filipinas o Indonesia, desviando el dinero de estos subsidios para mejorar la vida de las clases más empobrecidas.

En España los últimos 4 años del gobierno de coalición (el "más progresista de la historia") nos muestra que nuestros gobiernos no miran por el bien común y no emprenden los cambios estructurales que necesitamos con tanta urgencia. Esto contrasta con las múltiples experiencias de asambleas ciudadanas climáticas en los 3 últimos años, donde las personas informadas por la ciencia de manera independiente toman resoluciones a favor de políticas públicas de suficiencia y de reducción drástica del consumo de bienes, de materias primas o de energía. La participación ciudadana refuerza la democracia representativa porque permite emanciparse de la influencia de los grupos de intereses y garantiza que el pueblo tenga realmente derecho a decidir sobre su futuro. El último informe del IPCC recomendó una “mayor participación pública en los procesos de política climática y gobernanza” porque “permite una transformación social más amplia hacia el cambio sistémico, incluso en contextos complejos, dinámicos y controvertidos”.

Ahora sabemos que las asambleas ciudadanas funcionan...

…Y que son capaces de emprender la transformación profunda del sistema que necesitamos. En España por ejemplo, la Asamblea Ciudadana por el Clima que se celebró entre 2021 y 2022 acordó con porcentajes de apoyo superiores al 90% medidas como:

  • Una mayor frecuencia, conectividad, simplificación y abaratamiento del transporte público.
  • La promoción del autoconsumo y el desarrollo de comunidades energéticas.
  • La regulación de precios e impuestos energéticos.
  • La implantación de medidas que impulsaran una transición agroecológica.

Pero para que las resoluciones de las asambleas ciudadanas no caigan en saco roto y se apliquen de verdad, estas deben de ser permanentes y vinculantes tanto a nivel europeo como nacional y autonómico. Además también deben incluir a todas las personas que residen en el territorio, independientemente de su situación legal.

El tiempo se nos agota y solo a través de la movilización social y la desobediencia civil podremos conseguir que se tomen medidas reales. Si miramos al pasado podemos ver como la desobediencia civil noviolenta ha jugado un papel vital en muchos de momentos históricos como en la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos.

Stop subsidios fosiles

Historias de éxito

En Países Bajos en noviembre de 2022 más de 500 activistas de Extinction Rebellion y Greenpeace paralizaron el aeropuerto de Ámsterdam durante horas para protestar contra los jets privados y la contaminación de la aviación consiguiendo que el aeropuerto prohibiera los vuelos nocturnos, los aviones ruidosos y los jets privados para 2025. También en los Países Bajos, Extinction Rebellion logró que el parlamento pidiera un plan al gobierno para eliminar los subsidios a los combustibles fósiles, a través de una serie de protestas que comenzaron en 2022 con el bloqueo de una autopista y que el pasado sábado 6 de abril marcó su bloqueo número 37.

Campaña Stop EU Fossil Subsidies

Protestas similares contra los subsidios a los fósiles están ocurriendo en otros países europeos, como Bélgica y Alemania. Ante la urgencia de la situación, ahora más que nunca es prioritario organizarnos y actuar. Por eso desde XR-España convocamos a una semana de movilización del 27 de mayo al 2 de junio, dentro de la campaña Stop EU Fossil Subsidies, para presionar a nuestro gobierno y a los partidos que se presentan a las elecciones europeas para poner fin a los subsidios fósiles.

¡PARTICIPA EN LA REBELIÓN!

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Hecho con amor y furia Extinction Rebellion (XR o Rebelión contra la Extinción) es un movimiento que se hace en conjunto. Todos nuestros diseños y obras de arte pueden ser utilizados de manera no comercial con el propósito de salvar el planeta. Esto no significa crear mercancía para recaudar fondos o enviar a XR un porcentaje de sus ventas. No respaldamos ni creamos ninguna mercancía y perseguiremos y denunciaremos a cualquier persona que lo haga. El símbolo de XR fue diseñado en 2011 por el artista callejero ESP, que presta el uso a XR bajo las mismas condiciones: www.extinctionsymbol.info